Diferencias entre Leasing y Renting

Diferencias entre Leasing y Renting

Diferencias entre leasing y renting

¿Cuál es la diferencia entre Leasing y Renting?

Es una de las grandes preguntas que se hacen muchos gerentes o responsables de compras de las PYMES españolas.

Hace muchos años que el renting está claramente implantado en nuestro país y sin embargo esta duda sigue apareciendo.

A continuación, vamos a tratar de resolver la duda sobre las diferencias entre el leasing y el renting de forma sencilla y vamos a intentar que os quede totalmente claro cuál es la mejor opción para vuestro negocio si vamos a incorporar un nuevo coche.

 Lo primero que debe quedar claro es que en leasing estamos comprando un coche y en renting estamos alquilando un coche. Es decir, la propiedad del coche es nuestro en leasing o es de otro en renting. Aquí tenemos la primera diferencia.

 El renting es un alquiler puro mientras que el leasing es una financiación, y aquí tenemos la segunda diferencia fundamental.

El leasing, como financiación, se comunica al Banco de España y por tanto la deuda aparece en el sistema bancario. Una PYME tiene que tener ciertas precauciones con sus niveles de endeudamiento pues éstos afectan a los tipos de intereses con los que va a trabajar en todos los productos bancarios.

El renting, por contra, al ser un alquiler no computa como deuda. Punto para el renting.

¿Qué servicios incluyen el leasing y el renting?

Vamos ahora con los servicios incluidos en uno y en otro.

En renting están todos los servicios incluidos en la cuota, mientras que en leasing no hay ningún servicio incluido.

Pero esto no hace mejor a uno que otro, simplemente en leasing tendremos que contratar los servicios por fuera de la operación: seguro, mantenimiento, averías, impuestos municipales, ITV, neumáticos, asistencia en carretera, etc…

Y es muy probable que podamos conseguir mejores precios si lo hacemos nosotros que los que nos ofrecen los operadores de renting.

¿Y el valor residual?

Por último, vamos a ver que sucede con el valor residual.

En el leasing, como norma general es una cuota más y, por tanto, el día que abonemos a nuestro banco o financiera esa última cuota la propiedad del vehículo será pura y legalmente nuestra.

En el renting no existe una opción de compra como tal, sino que el operador nos ofrecerá la compra del coche en un precio que será muy similar al precio de mercado del coche. ¡Punto para el leasing aquí!

Y entonces, ¿A mí que me interesa hacer?

Pues vamos a entrar en el campo de la opinión, y como nosotros siempre opinamos, diremos que para una empresa y un uso puramente profesional la mejor opción es el renting.

Económicamente la diferencia es escasa. Fiscalmente la diferencia es escasa, pero a nivel de comodidad, despreocupación y sencillez de gestión el renting gana por goleada.

Ahora bien, si lo que estamos haciendo es comprando nuestro coche particular y poniéndolo a nombre de una empresa, aunque su afección a la actividad profesional sea escasa, si como suele ocurrir en estos casos, vamos a tener el coche como hace un particular durante más de 5 años, si además nuestro coche va dormir en nuestro garaje y no lo va a utilizar nadie más que nosotros… Entonces el leasing es tu producto.

¿Pero qué ocurre si tengo una empresa y una flota de más de 10 coches?

Pues en nuestra opinión el renting es más ventajoso siempre y cuando cumplamos con una serie de requisitos que abordaremos en artículos venideros.

Cuando nuestra flota alcance una masa crítica de, digamos 40 coches, entonces tendremos que volver a analizar el sistema de gestión con las gafas de economista, pues puede que el leasing nos suponga ahorros importantes, aunque sea a costa de horas de gestión.

Cuando estos ahorros superan los costes en horas, la cuenta se invierte y el leasing vuelve a ser una opción. Como hemos comentado más adelante escribiremos un post sobre la gestión de flotas medianas o grandes y los modelos diferentes.

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Esta entrada tiene 3 comentarios

  1. Luis M.

    Buenos días Rentinguru. Mi consulta es la siguiente: Tengo un renting con Caixa y por cuestiones de actividad tengo que devolver el coche. Desde Caixa me están pidiendo una cantidad ingente de dinero por devolver el coche y no lo entiendo. Qué puedo hacer? Esto se puede negociar?

    1. Renting Gurú

      Buenos días Luis, el problema que tienes es muy habitual con este producto.
      El renting es un matrimonio que dura 3, 4 o 5 años y romperlo, como buen matrimonio, es muy caro.
      Aunque el asunto da para un post completo, voy a intentar explicarte porqué es tan caro y te daré nuestra opinión sobre qué debes hacer.
      Lo primero, es caro porque las cuotas se calculan en base a una amortización lineal, es decir, si el coche vale 20.000€ y tiene un valor final a 4 años de 10.000€ amortizaremos 2.500€ cada año.
      Pero quiere la mala suerte que el mercado de usados, que es donde va a ir a parar el coche si lo cancelas, tiene sus propios ritmos, y éstos, no son lineales.
      Para que nos podamos hacer una idea, un coche pierde el primer día aproximadamente el 30% de su valor, pero tu cuota de renting es la misma todos los meses. Esa diferencia entre valor contable del coche y el precio de mercado crea cada mes un déficit en contra de arrendatario, o sea, en tu contra.
      A medida que la operación avanza en el tiempo, el déficit es menor y el último día de la operación es cuando el valor de mercado y el valor contable se igualan.
      Si tú cancelas el contrato en la mitad de su duración, Caixa te va a pedir que les compenses por la pérdida que generas por el motivo explicado anteriormente. ¿Cuánto?
      Pues algo muy parecido al 50% de las cuotas pendientes hasta la cancelación, porque eso se aproxima mucho a la diferencia entre el valor contable del coche y su precio de mercado.
      Es verdad que los tiempos que corren favorecen mucho la venta del usado y esa, amigo de Rentinggurú, es tu gran baza para negociar.
      Primero pídeles el precio de cancelación con compra del coche, así tendrás una primera aproximación de cuál es el valor contable, después diles que estás dispuesto a pagar la diferencia entre ambos valores (contable y mercado) y si aceptan, reduciras la factura considerablemente.
      Si después de esa propuesta no consigues nada positivo, entonces solo podemos decirte que los contratos están para cumplirlos.